No hay excusa para
tener una buena alimentación
Te has preguntado alguna vez ¿Qué es una
buena alimentación? Y ¿Cuáles son las consecuencias de no tener una? En el
presente ensayo explicaremos que no hay excusas validas para tener una buena alimentación. Parece que
la mayoría tiene la idea de que es imposible o es un enorme sacrificio el comer
sanamente y no se da cuenta que los malos hábitos alimenticios del mexicano son
un gran problema en la actualidad.
Se escuchan argumentos como: “No tengo
tiempo”, “No me alcanza el dinero”, “La comida de dieta no tiene buen sabor” y
“¡Pues si no estoy gordo!” y estos parecen muy validos poniéndose en el
contexto del emisor pero analizando a fondo las ventajas de alimentarse
sanamente se vuelve obligatorio encontrar una solución a cada uno de estos
conflictos.
Vamos a empezar describiendo que es una buena
alimentación. Consiste en una dieta variada, en la que siempre estemos al
tanto de las porciones y debe depender de las necesidades de cada persona
y las actividades que realice, es decir, que los alimentos o bebidas que se
consuman durante el día aporten la energía suficiente para mantener un
crecimiento y desarrollo adecuado en los niños, un peso saludable en los
adultos y que promueva la prevención de enfermedades. En México, tenemos como
referencia “El Plato del Buen Comer”, Las características de una dieta
correcta, es una buena guía para aquellos que apenas se muestren interesados en
el tema de la alimentación; y sobre todo es de muy fácil acceso.
Tenemos problemas como la costumbre de
consumir alimentos de origen animal y preparaciones altas en grasa, adicional a
esto sufrimos una fuerte influencia americana que ha provocado el aumento en el
consumo de productos industrializados, altos en grasas, azúcares y sodios.
Asimismo nos vemos afectados por situaciones sociales como el trabajo, la
escuela y demás actividades, por lo que se disminuye el tiempo dedicado a la
planeación y organización de la alimentación en la familia. La falta de
información correcta y el exceso de información errónea, hacen que la
alimentación se lleve incluso a caminos riesgosos para la salud.
Según un artículo publicado por
la revista Salud Pública de México, “México como otros países en vías de desarrollo,
experimenta una transición epidemiológica y nutricional. Las enfermedades
crónicas asociadas con la dieta y los estilos de vida, como obesidad,
hipertensión arterial, dislipidemias y diabetes, aumentan de manera importante
en prevalencia y como causas de mortalidad. Por otro lado, las enfermedades
asociadas con la desnutrición, como la anemia y la talla baja, prevalecen por
encima de los niveles observados en países con ingresos y desarrollo similares
a pesar de una gran inversión en programas para combate de la desnutrición”.
Por tanto hemos de afirmar que las enfermedades relacionadas con una mala
alimentación no son un mito.
Una vez hecho conciencia de la importancia de
tener una buena alimentación proponemos las siguientes recomendaciones para cumplir
con una dieta sana y balanceada.
El primer paso a seguir es decidirse a
cambiar nuestro régimen alimenticio, hacer conciencia de que el respeto hacia
nosotros mismo y nuestro cuerpo es sumamente importante; de igual manera pensar
que es para beneficio propio y ser firmes en nuestra decisión. Cuando hablamos
de dieta, no tiene que ser aburrido o un sacrificio, ya que existen muchas
recetas muy sencillas de preparar y muy nutritivas, prueba y experimenta con
nuevos sabores.
Diseñar un menú semanal, basado o lo más
aproximado a la recomendación del plato del buen comer aunque lo ideal seria
tener acceso a un nutriólogo o un especialista. Una vez diseñado el menú
disponer de unas horas en tu día libre para realizar las compras necesarias y
cocinar o planear los tiempos para cocinar la comida en casa durante la semana.
Aprovecha las ofertas en cuanto a las
verduras y compra fruta de temporada para economizar y al mismo tiempo te
alimentaras sanamente.
Si eres de esas personas que trabaja todo el
tiempo compra mucha fruta, y las ensaladas son tu mejor opción, no necesitaras
un método de cocción complicado y prolongado, además son muy fáciles.
¡No te
limites! Si algo se te antoja puedes consumirlo pero de una manera adecuada y
en una sola porción.
Abre tu mente, tal vez eres de esas personas
a las que las verduras no son su mejor opción, pero tal vez es por la forma en
que las has probado, reinventa, crea, puedes usar aderezos naturales o
complementos que los hagan mas apetecibles, como vegetales con aderezo de miel.
Estos cambian radicalmente su sabor cuando los caramelizas, ¡experiméntalo!
Desgraciadamente en México, hemos crecido con
la costumbre de consumir productos procesados y con aditivos, los cuales están
saturados con grasas, sal, azúcar y que en realidad tienen un nivel nutricional
muy bajo y además el abuso en su consumo causa graves enfermedades (como
botulismo, saturnismo, cáncer, intoxicación por agroquímicos, entre muchas
otras). Gracias a esto se ha perdido el gusto por lo natural. La simple y
sencilla solución es adecuar a nuestro paladar a los sabores de la comida
natural y fresca, el cambio quizá para muchos no sea tan fácil pero si pudimos
adaptarnos a la comida enlatada y empaquetada, ¿por qué no mejor regresar a los
productos naturales? Tomará tiempo, sí, pero será para nuestro propio beneficio
y al final valdrá la pena cualquier esfuerzo realizado para sentirnos mejor y
tener una mejor salud.
Tal vez haya mil excusas por las cuales el
mexicano no come sanamente, pero no dejan de ser excusas, cuando uno realmente
quiere, lo puede, y si estas decidido a tener mejores hábitos alimenticios lo
lograras. Puedes empezar con cosas pequeñas y un cambio a la vez, verás que con
el paso del tiempo será parte de tu vida diaria comer sanamente. ¡Cuida tu
cuerpo! Recuerda que es el templo de nuestra mente.
La alimentación es un tema que a todos debe
preocuparnos y del cual tenemos que ocuparnos. Para poder
prevenir problemas en la salud es importante comenzar con la educación desde
que se es pequeño, así como se enseña a hablar, a caminar, a leer y escribir; y
más grandes a comportarse de manera adecuada ante la sociedad, lo mismo debe
ser con nuestra alimentación; debe comenzar en el hogar, quizá nuestros padres
no hayan tenido acceso a la información necesaria para transmitírnosla, sin
embargo, hoy en día los medios masivos de comunicación están llenos de esta
información donde nos informan acerca de los nutrientes que necesita el cuerpo,
las vitaminas que aporta cada alimento y la cantidad necesaria para que estemos
mejor a un nivel físico y mental. Así que está en nuestras manos comenzar a
impartir y concientizar a la gente de lo importante que es respetar nuestro
cuerpo a través de una alimentación adecuada.